Encima del agua

Me siento diferente porque me veo diferente, y viceversa. Leí fugazmente un par de pseudo no-poemas de mi antiguo blog, y no fui capaz de recordar a quién le escribí cada parte. Me gusta mi trencita. Y mi cama combina con Hadu.

Mi mente está hecha un desastre. Luego de las una y media, el tiempo sufre transformaciones que duran una canción. Una canción completa y ya son las tres, ¿te das cuenta? Una sola canción, pero es una canción completa, con todos sus detalles, escuchada por completo. Y podría durar más si sigo entusiasmándome. Pero hay cosas que prefiero vivir de día.

Debería estar sumergida en el agua, aún no entiendo bien cómo es que las medusas funcionamos. A veces, también me acuerdo de ti y de todo lo que me dijiste que no hiciera. Y se me revuelve todo dentro. Escalofríos y una pasada rápida a varios años en el pasado. He recordado un montón de cosas últimamente, que me han hecho gracia. A veces pienso que las sueño, pero de cualquier modo las estoy recordando y me llenan de una nostalgia brillante y tibia, y especialmente real.

No sé bien qué me gusta a estas alturas, he aprehendido todo lo que ha estado a mi alcance. Encierro mis nuevas deducciones en una jaula de hielo y las dejo ahí hasta que se liberan. Me gustaría poder contarte todo lo que he comprendido a estas alturas, sobre nosotros dos, más que nada para probar si logro enseñarte algo.

A mi propio ritmo y con esa calma inquietante, me que acercado lo suficiente a mis propias expectativas para verlas tal y como son. A eso le debo que me encuentre donde estoy. De verdad que prefiero escribirlo todo aquí, antes que recurrir a ti, y eso me hace feliz.

Han pasado cosas extrañas, se han dicho palabras innecesarias y sucesos inesperados nos han movido, pero todo sigue jodido y radiante en su medida. A veces uno se acostumbra demasiado y se pierde en eso. Tengo mis propias inquietudes vanas ahora y creo que puedo debatirme tranquilamente cómo solucionarlas.

Quería decirte que esta vez he tenido razón, y me resulta muy extraño. Muy, muy, muy extraño. Así que avanzo a tentativas pero con esa confianza tuya cuando me hablabas sobre la vida. Creo que estoy encaminada a decidirme,

y eso me hace sinceramente feliz.

Al final se me ha hecho tarde, pero me deja mejor haber podido soltarme un poco. Aún no confío por completo en este lugar, ni le he dado un rumbo específico. Es inusualmente complicado, pero sé que algo podré hacer.

Por cierto, no te preocupes por robar mis canciones; decidí que seguiré mostrándotelas, porque sé que sigues leyéndome. No tienes que agradecerme.

Quería cantarle esto a Shimón, pero me da miedo. Me dijo que estaría sin internet, así que mañana será un día de Yuri kuma, en mi propia soledad. Y quizás grabar, a menos que suceda lo-que-sabemos-que-podría-suceder. ¡Te traeré noticias!