El semen de bae sabe bien
Entradas
Mostrando entradas de abril, 2019
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
¡Me llamo Hani porque soy dulce y me dicen Javi! O al revés. Mido 1,45, nací durante la noche y aún no sé mi tipo de sangre. Mis amigos dicen que soy un gatito caprichoso y que el rosa y el amarillo me quedan bien. Quizás piensan algo diferente. Siempre me han gustado mucho la ropa y el maquillaje, y ahora que dejé de querer morirme, me hace feliz esforzarme por verme bonita y cuidar de mí. También me gustan mucho las frutas dulces y los dulces con sabor a frutas, ¡mi dulce favorito es el caramelo con sabor a cereza! y hace una semana probé el mango por primera vez. El fanatismo por las cosas no es lo mío y desisto fácilmente del amor incondicional. Creo que la vida sería más fácil si creyera en Dios. ¡Adopté a una cachorrita hace 7 meses y aún no nos aburrimos de querernos! Mi terapeuta piensa que soy cautelosa y que racionalizo mucho mis sentimientos, pero también alaba mi sonrisa y mi manera de explicar las cosas. A pesar de no tener que hacerlo, me ha dicho que soy una buena pe
Puntitos suspensivos
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Estoy negando mi amor porque no he plantado las semillas que me dio. No sé si sentir magia y chispitas me ha convencido de lo contrario aún, pero a cada segundo lo siento más y más presente. El Andrés es un tipo bacán. A pesar de tener muchas cosas que seguir evadiendo, se rindió ante su naturaleza y abrazó su miedo. Tiene la sonrisa de un niño pequeño y sus ojitos brillan cuando escuchamos música, acostados en mi cama, y me cuenta anécdotas que vivió con sus amigos. Tiene miles de pecas que parecen estrellitas sobre su rostro y sus manos están tibias todo el tiempo. Si lo miro cuando tiene los ojos cerrados, el tiempo pasa muy lento... A veces me da palmaditas en la cabeza y me dice que me quiere, y casi siempre le creo. Es un ave usando una máscara de zorro. Es un pajarito entre miles de girasoles. Y es un buen perro. Nos acercamos tan lentamente que olvidé por completo mis propias ilusiones. Lloré mares y cielos invernales, y mi corazón se congeló porque no quise sentirme as